Tengo manchas. ¿Y ahora qué?

Imagínese que se levanta el día de una gran presentación, una primera cita, unas vacaciones familiares y lo primero que ve en el espejo es una mancha antiestética que le devuelve la mirada. ¿Un poco dramático? Tal vez, pero todos somos culpables de pensar que nuestras imperfecciones entran en la habitación antes que nosotros. Aunque se trata absolutamente de una exageración inventada en nuestras mentes, lo cierto es que no son una adición bienvenida al día de nadie.

¿Qué es una mancha?

Una mancha es una marca que aparece en nuestra piel, definida por el diccionario Merriam-Webster como "una imperfección notable". Aunque suene duro, cuando una de estas marcas aparece en nuestro rostro, la palabra se ajusta perfectamente a la descripción.

Las manchas pueden deberse a innumerables factores. Las hormonas desempeñan un papel muy importante; es bien sabido que la mayoría de nuestras primeras manchas aparecen al llegar a la pubertad. Después de este florecimiento de excreción hormonal que arruina los anuarios de secundaria y bachillerato, la sobreproducción de imperfecciones parece disminuir. Hasta que nos hacemos adultos y los cambios hormonales, el estrés, las décadas de sol y los poros obstruidos nos pasan factura.

El tipo de piel También hay que tener en cuenta el tipo de piel y la genética. Algunas personas son más propensas a las imperfecciones que otras, lo que puede resultar muy frustrante. Además, la piel cambia con el tiempo y fluctúa con los cambios corporales, el clima y los distintos factores de estrés que afectan a nuestra vida cotidiana. No existe una causa principal de las manchas, ya que son muchos los factores que contribuyen a su aparición.

Tipos de manchas

Las manchas se presentan de muchas formas diferentes. Será más fácil saber cómo tratar tu imperfección si sabes qué tipo tienes.

Acné

Cuando hablamos de tipos de acné, los puntos negros y blancos son probablemente los más reconocibles. Son las pequeñas protuberancias irritantes y dolorosas que aparecen en tu cara después de esa porción extra de pizza, llenas de grasa, bacterias e incluso suciedad. Los cambios hormonales también pueden contribuir a la formación de acnéLos cambios hormonales también pueden contribuir a la formación de acné, provocando más brotes en los años de formación y, en su caso, durante el ciclo menstrual.

Pelos encarnados

Los vellos encarnados son exactamente como suenan. El sudor, la suciedad y las bacterias suelen impedir que el vello crezca correctamente y atraviese la piel, provocando enrojecimiento y malestar general. Los vellos encarnados pueden aparecer en cualquier parte, pero pueden ser más prominentes donde la gente se afeita (piense en la línea del bikini o debajo del cuello).

Cicatrices

Las cicatrices son marcas en la dermis donde la piel ha sido dañada y cicatrizada por un tipo diferente de tejido porque la herida o la abertura no pudo curarse en circunstancias normales. Se caracterizan por ser de un tono diferente al de su tono natural de piel.

Manchas de la edad

Las manchas de la edad son manchas oscuras en la piel que se atribuyen a la exposición al sol. Los rayos UV provocan una mayor producción de melanina y, en ocasiones, aparece una congregación de células pigmentadas. Suelen ser más visibles en las personas mayores que han estado expuestas al sol durante décadas.

Hiperpigmentación

La hiperpigmentación no es más que un cambio del color de la piel debido a la sobreactivación de la melanina. Los daños producidos por el sol, las cicatrices del acné y los cambios hormonales pueden contribuir a algún tipo de hiperpigmentación.

Herpes labial

Los herpes labiales son protuberancias parecidas a llagas que surgen del virus del herpes simple. Estas protuberancias pueden ser muy dolorosas y antiestéticas, y pueden permanecer latentes o volver a activarse en cualquier momento (sobre todo cuando se está estresado).

Melasma
Se trata de un problema cutáneo increíblemente común que suele confundirse con el melanoma y que se da con más frecuencia en las mujeres. Su síntoma principal es la decoloración de la piel, que aparece sobre todo en la cara. Se trata de una afección benigna e indolora, pero nunca está de más vigilar el comportamiento de la piel a medida que envejecemos.

Cáncer de piel

El cáncer de piel puede ser una afección cutánea muy grave o completamente benigna, caracterizada por pequeñas manchas pigmentadas que son el resultado de células cancerosas. Algunos cánceres de piel frecuentes son el carcinoma de células basales, el carcinoma de células escamosas y el melanoma maligno. Es importante que hable con su médico si tiene pequeñas manchas pigmentadas (que pueden parecer lunares) para asegurarse de que no son malignas.

Tratamiento y prevención

Tratar y prevenir algunas de estas manchas puede ser sencillo, mientras que otras serán cada vez más difíciles. Dado que la piel puede ser tan sensible, es difícil identificar un producto o rutina de cuidado de la piel infalible que funcione, por lo que hay que tener algo de imaginación y paciencia a la hora de intentar conseguir una piel más clara y sana.

Evite los alérgenos

En ocasiones, las manchas pueden estar causadas por una alergia a algo de tu vida cotidiana o con lo que te has topado. Normalmente, la hinchazón, el enrojecimiento y el posible picor son síntomas de una reacción alérgica. Si notas células cutáneas muertas y escamosas, una erupción repentina o una zona de brotes después de comer algo, llevar algo puesto o estar cerca de algo que no le gusta a tu cuerpo, intenta recordar qué era y evítalo en el futuro.

Tratamiento del acné

Los distintos tipos de piel requieren soluciones diferentes. Si tus poros tienen exceso de grasa, puede que tengas más suerte con un limpiador que contenga ácido salicílico o un astringente. Sin embargo, si tienes la piel seca, deberás evitar los productos que tienden a resecarla, como los astringentes.

También debes tener cuidado con los granos, ya que reventarlos puede dejar marcas oscuras y cicatrices. No debes reventarlos, sino reducir su tamaño aplicando una compresa fría o incluso bolsas de té verde en la zona afectada. No obstante, si no puede resistirse, asegúrese de reventar los granos por completo y de limpiar cuidadosamente la zona con un antiséptico como el peróxido de benzoilo.

Tratamiento de las manchas oscuras y la hiperpigmentación

La protección solar, independientemente del tiempo que haga, es la mejor forma de prevenir la aparición de marcas oscuras e hiperpigmentación en la piel. Las cremas que incluyen FPS 30 en su fórmula suelen ser una opción más rentable, mientras que el tratamiento de estas afecciones puede ser un poco más invasivo y caro. Los procedimientos dermatológicos pueden ayudar a conseguir una nueva capa de piel; sin embargo, esto puede ser doloroso y mucho más complicado que simplemente llevar protección solar.

Tratamientos virales o bacterianos

Para cualquier mancha que pueda estar causada por un agente vírico o bacteriano, lo más probable es que se requiera intervención médica. La mayoría de los tratamientos para este tipo de manchas requieren la prescripción de un agente antivírico o antibacteriano. Pero, por desgracia, algunos de estos virus no tienen cura, por lo que simplemente estarás controlando una afección cutánea continua.

Lo mejor es que hables con tu médico si alguna de tus manchas empieza a aumentar de tamaño, a sangrar, a picar o a preocuparte. También es importante tomar con cautela las búsquedas en Internet. A veces, los motores de búsqueda toman nuestra descripción de una imperfección y nos diagnostican algo mucho más grave de lo que realmente tenemos. En caso de duda, llame a su médico o concierte una cita virtual.

Mantén una higiene adecuada

Hacer ejercicio, comer bien e hidratarse son las cosas más importantes que puedes hacer por tu cuerpo, por dentro y por fuera. Hidratar la piel, eliminar las toxinas mediante el sudor y mejorar la circulación de los vasos sanguíneos tendrá efectos positivos en los procesos de curación de las agresiones diarias a la piel.

Puedes complementar estas actividades con remedios naturales, como hamamelis, vinagre de sidra de manzana y aloe vera. Sólo asegúrate de que no tienes alergia a estos materiales, para que puedas aprovechar completamente los beneficios de sus propiedades antiinflamatorias, hidratantes y eliminadoras de bacterias dañinas, todo a la vez.

Por último, si practicas constantemente una buena higiene y te lavas la cara y el cuerpo, podrás eliminar las bacterias grasas antes de que se conviertan en un problema. Crear rutinas que te ayuden a adquirir el hábito de exfoliarte, limpiarte con cremas o productos para el cuidado de la piel o productos para el cuidado de la piel, y calmar tus sentidos para dormir plácidamente por la noche marcará una gran diferencia a la hora de hacer frente a las imperfecciones.